Año 2012

Localización Leiro, Ourense

Categoría Vivienda

Propietario Particular

En el entorno de San Clodio, en un área de protección patrimonial, se recuperó  una vivienda  y de una edificación dedicada a bodega con una  única fachada exterior y con las otras  situadas entre medianeras. Como elemento articulador entre las diferentes  edificaciones actúan dos patios intermedios, uno de ellos con una escalera exterior de doble desembarco y una terraza. Una de las  premisas básicas a la hora de afrontar el proyecto, fue mantener el carácter tradicional de la edificación, recuperándola entorno al patio interior de mayor dimensión.

En la planta baja, en el volumen que conforma las escaleras, se dispone un aseo y una zona de lavandería.

En la bodega existente se plantea un espacio diáfano dedicado a biblioteca y zona de estudio, con una pequeña entreplanta volada que sirve para resolver la conexión con  la vivienda a cota superior mediante una terraza cubierta, además de alojar las estanterías de almacenaje de libros. La conexión en planta baja se realiza a través de un corredor acristalado. Para conectar el plano volado de dicha estancia con la zona de estudio, se coloca sobre un canal de piedra del antiguo lagar una escalera levitando sobre éste para conectar ambos niveles.

En el volumen principal la organización programática consiste en salón en la zona más próxima a fachada, una escalera liviana que unirá las dos plantas y una zona de comedor y cocina.

En planta primera se dispone el dormitorio y baño principal, y en el entorno de la escalera, un espacio polivalente con un uso preferente de taller de pintura, que independiza las estancias anteriores del otro baño y del dormitorio secundario, que se abre a los dos patios interiores.

Se integra en el entorno, sobreponiéndose a las limitaciones geométricas de la edificación, persiguiendo la continuidad espacial y la captación de luz natural, mediante las interrupciones en las losas, dobles alturas, vacíos y una escalera ligera e inmaterial.

Un gran lucernario y el volcar a los dos patios las distintas estancias permite captar la luz natural. Por la propia configuración de la edificación, al margen de las bandas acristaladas en los forjados para conectar visualmente los espacios, y el empleo de dobles alturas, el gran lucernario situado cenitalmente en el área de taller de pintura, la mayoría de las estancias se vuelcan al patio principal.